Por el debut de este Clausura 2009 nos enfrentábamos a Los Pibes del Fondo, quienes en la categoría B, el semestre anterior, habían cosechado 7 victorias, 1 empate y 7 derrotas. Se trataba de un desafío que era preciso sacar adelante de cara a obtener un nuevo título; sin embargo, en unos 20 minutos iniciales para el olvido, la posibilidad de comenzar sumando de a 2 unidades quedó en la nada.
El equipo salía a la cancha con Galle, Sica, Pela, Tucho y Tano; en el banco esperaban Ale Pereyra, Ari Camblor y, posteriormente, llegaría Rodri Pedernera. El inicio del juego mostró a un Rolito sin identidad, con desacoples entre los defensores, los delanteros y entre ambas líneas. Más allá que individualmente los jugadores no estaban teniendo una mala tarde, la labor en conjunto era pobre y esto derivaría en que, 1° tras un error del Galle y luego un desacople, Rolito se coloque 0-2. A pesar que con un gol del Buda Seen las esperanzas de cara al complemento se reanudaban, un nuevo error en el cual jamás se despejó la pelota y se la mantuvo viva en la propia área, desembocaría en el 1-3. A falta de pocos minutos para la finalización de los 20 iniciales, los albicelestes fueron desesperadamente a reducir diferencias pero terminarían pagando caro quedar mal parados de contra golpe y recibir un 4° gol, con el cual finalizaría la etapa.
El complemento mostró una nueva cara por parte de los bicampeones D/C. De la mano de una ofensiva agresiva, comandada por Tucho Jurnet y el Tano Fausto, sería el número 13 quien facturaba por duplicado y abría la puerta de la esperanza. La misma se mantenía abierta por parte de una defensa que, de la mano de Pereyra y Sica comenzaban a darle orden a la última línea y parar las embestidas de Los Pibes del Fondo.
El posterior ingreso de Seen por Tucho daría nuevo aire a la delantera y sería, tras pase de éste, que Christian Fausto igualaba lo que 15 minutos atrás parecía imposible. A partir de ese momento el juego se hizo de ida y vuelta; Galle, quien arrancó con una mala tarde fue levantando su nivel y tapando 2 mano a mano conservaba la ilusión de poder dar vuelta la tortilla. Y finalmente, esto sería consumado a falta de pocos minutos del silbatazo decisivo, cuando una vez más Tucho Jurnet definía una buena jugada colectiva y ponía las cosas 5-4.
De allí en más, y como consecuencia del desgaste realizado para dar vuelta el juego, Los Pibes comenzaron a atacar por todos los sectores de la cancha. La defensa comandada por Sica y ayudada por momentos por Rodri Pedernera daba créditos de que la victoria sería rolitense, pero, a falta de 1 minuto para la conclusión del match, un remate de afuera del área pondría cifras definitivas de 5-5.
Un empate con sabor a derrota, sobre todo porque el rival era inferior, y porque quedó la sensación que habiendo sido un poco ordenados en los primeros 20, el triunfo hubiera sido nuestro. Un punto perdido que tiene la imagen de ser aquellos que se padecen a lo largo del certamen y que "obliga", por más prematuro que parezca, a no relegar más unidades hasta llegar a los duelos de jerarquía; como por ejemplo, El Corral y Patyunpe.
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